¿Enzimático, gommage, hecho por ti o mecánico? ¿Qué exfoliante corporal es el mejor?
Hola Chicas 😉
Déjame preguntarte directamente: ¿Eliminas las células muertas de tu epidermis?
¿Te exfolias, frotas y suavizas la piel de tu cuerpo?
Si es que no, entonces intentaré convencerte (pero sin presiones) para que le des una oportunidad a este procedimiento. Créeme, en el momento en que apliques un exfoliante en tu piel, verás y sentirás un cambio inmediato. Un buen exfoliante es capaz de hacer maravillas. Además, no hay mejor ayuda para combatir la celulitis que un buen exfoliante corporal.
Entonces… ¿Quiéres saber más de este maravilloso producto? 🙂 ¡Sigue leyendo!
Exfoliante corporal. ¿Qué es y por qué deberías usarlo?
Lo primero que hay que saber es que el propósito de un exfoliante corporal no es solo dejar tu piel suave y perfecta sino que es imprescindible a la hora de mantener sana tu piel. Este cosmético es capaz de eliminar impurezas, favorece que tu piel produzca nuevas células, mejora la elasticidad y retrasa los procesos de envejecimiento cutáneos.
Ten en cuenta que tu piel produce nuevas células constantemente. Las que logran cumplir con su función simplemente acaban muriendo y se exfolian. Lamentablemente, como consecuencia de las alteraciones en el metabolismo, la contaminación urbana y la exposición al estrés, a nuestra piel le resulta difícil llevar a cabo una exfoliación saludable y una eliminación de estas células muertas de la epidermis de la forma en la que debería hacerlo. ¿Qué debemos hacer en esta situación? Por supuesto, ¡ayudarla! Y no hay mejor manera de eliminar células muertas de la epidermis que usando exfoliantes.
¿Cómo actúa un exfoliante en la piel?
Un exfoliante elimina impurezas y células muertas de la epidermis, elimina la obstrucción de la salida de las glándulas sebáceas y previene los puntos negros (especialmente en el rostro, sin embargo, mucha gente se queja también de tener puntos negros en la espalda). Limpiar la piel con un exfoliante la prepara para recibir y absorber mejor el tratamiento de una crema, bálsamo o serum. Además, sería más fácil para la piel absorber una crema autobronceadora de forma más uniforme. También cabe mencionar que el exfoliante es capaz de estimular la piel para producir células nuevas y más jóvenes. Gracias a esto, la piel se ve más joven, se vuelve más elástica y se aceleran sus procesos de auto-regeneración.
Tipos de exfoliantes
1. Exfoliantes Mecánicos – Es el tipo de exfoliante más habitual. Contiene partículas exfoliantes gruesas o ligeramente más suaves (son los agentes responsables de eliminar las células muertas de la epidermis). Obviamente, los exfoliantes corporales, a diferencia de los exfoliantes faciales, son más granulosos porque esta característica es responsable de exfoliar las partes de la piel que son significativamente más gruesas. Básicamente, se pueden usar varias sustancias como agentes exfoliantes, y pueden ser cáscaras de frutos secos (por supuesto, molidas), semillas, azúcar, sal, café. Además, los exfoliantes mecánicos son perfectos para tratar pieles grasas y en este caso puedes aplicarlos incluso dos veces a la semana. Si tienes la piel seca es mejor tratarla con gránulos finos y realizar el tratamiento dos veces al mes. Si tu piel está muy deshidratada, hazte con exfoliantes que contengan azúcar o sal: aparte de suavizar la piel también la nutren y cuidan su pH. Las partículas de sal y azúcar se disuelven debido al masaje y su efecto puede llegar a zonas más profundas de la piel.
2. Exfoliantes Enzimáticos – Perfectos para piel sensible con tendencia al enrojecimiento. Este tipo de exfoliante no contiene partículas abrasivas y no está pensado para frotarse sobre la piel. En vez de eso, se aplica sobre el rostro y se tiene que dejar actuar para que disuelva las uniones intercelulares de las células muertas. Se aclara tras 15-20 minutos.
3. Exfoliantes Gommage – Pueden describirse como una combinación de los dos tipos anteriores de exfoliantes. Debe aplicarse sobre la piel (dándole tiempo suficiente para actuar sobre las células de la epidermis) y después NO DEBE aclararse sino retirarse por arrastre (para describirlo mejor: se forman como pelotillas al frotar en círculos con los dedos). Lo que es interesante del exfoliante gommage es que es apto para todos los tipos de piel, incluyendo sensibles, secas y maduras.
Exfoliante corporal casero. ¿Es mejor que el que encontramos en tiendas?
El exfoliante casero no es más que el que se hace en casa, a partir de ingredientes naturales y fáciles de encontrar. Es genial porque no contiene sustancias artificiales. Cuando se trata de cuidado corporal, no hay nada mejor para reemplazar a un exfoliante clásico que los granos de café molidos 🙂
No tiene sentido pagar de más para hacerte con un exfoliante corporal de precio exorbitantemente elevado para combatir la celulitis… especialmente cuando te das cuenta de que la mayoría de ellos contienen café. Este es el ingrediente que más ayuda a hacer frente a la piel de naranja.
El asunto es un poco diferente cuando se trata de exfoliantes faciales. Por supuesto, puedes hacer exfoliantes faciales caseros y seguramente hayan muchísimas recetas geniales para hacerlos tú misma, sin embargo, en términos de cuidado corporal, debes tener mucho cuidado al aplicar exfoliantes caseros. El problema aquí es que, desafortunadamente, pueden causar más daño que beneficio. Aquellas personas con piel excepcionalmente sensible, propensa al acné o que presente cualquier otra alteración, deberían ser muy quisquillosas cuando elijan un exfoliante facial con el que tratar su piel o directamente, pedir consejo a un especialista. Si tienes tiempo y dinero, puede ser beneficioso recibir este tipo de tratamiento en alguno de los muchos salones de belleza que lo ofrecen. En tales establecimientos, te atenderán expertos que te recomendarán ciertos procedimientos que se adapten a tu tipo de piel (p.ej. tratamiento anti-acné con almendras). Además, los salones de belleza también ofrecen exfoliantes especiales dirigidos a las áreas del cuerpo afectadas por la celulitis. El más famoso es el exfoliante corporal Thalaspa que contiene particulas finas de sal marina, aceite de jojoba, extracto de té verde, aceite de cáscara de limón, aceite de semillas de melocotón y cera de abejas. Como puedes ver, todas las sustancias son naturales y fáciles de conseguir. Por lo tanto, puedes preparar tú misma en casa un exfoliante corporal a base de sal y aceite. En muchos casos, mezclo café con sal marina y añado aceite de jojoba o almendra. Al final, agrego una pizca de zumo de pomelo y lo mezclo todo bien. Y básicamente eso es todo 🙂 ¡Cuídate! <3